Asia

Iván Turguéniev


Novela corta



I

Tenía yo entonces veinticinco años —empezó N. N.—, así que, como ven, se trata de una historia muy antigua. Acababa de alcanzar una posición independiente y había partido para el extranjero, no con intención de «completar mi educación», como se decía en aquella época, sino simplemente porque tenía ganas de recorrer esos mundos de Dios. Gozaba de buena salud, era joven, de ánimo alegre, no me faltaba el dinero, las preocupaciones aún no habían tenido tiempo de visitarme, vivía libre de agobios, hacía cuanto se me antojaba; en una palabra, florecía. Por aquel entonces no se me pasaba por la cabeza que el hombre no es una planta y que no puede florecer mucho tiempo. Lajuventud se alimenta de dorados alfajores y se figura que es el pan de cada día; pero llega un tiempo en que hasta el pan le falta. Pero no merece la pena que hablemos de esa cuestión.

Viajaba sin ningún fin, sin ningún plan; me detenía en cualquier lugar que fuera de mi agrado y partía en cuanto me embargaba el deseo de ver caras nuevas; sí, caras nuevas. Sólo las personas me interesaban. Odiaba los monumentos curiosos, las colecciones notables; la simple visión de un ujier suscitaba en mí un sentimiento de tristeza y malestar. En el Grüne Gewölbe de Dresde estuve a punto de perder el juicio. La naturaleza ejercía en mí un efecto extraordinario, pero no me gustaban sus pretendidas bellezas, las montañas extraordinarias, las rocas, las cascadas; no me gustaba que se me impusiera ni que me molestara. En cambio, los rostros, los rostros vivos, humanos, las palabras de la gente, sus movimientos, sus risas: sin eso no podía pasarme. En medio de la multitud siempre me sentía especialmente alegre y animado; encontraba una particular satisfacción en ir donde iban los demás, gritar cuando ellos gritaban y, al mismo tiempo, disfrutaba contemplando esos gritos ajenos. Me divertía observar a la gente... aunque la verdad es que no puede de

Fin del extracto del texto

Publicado el 28 de enero de 2017 por Edu Robsy.
Leído 71 veces.