No hay más información sobre el texto «La Mujer Alta».
Este texto forma parte del libro «Narraciones Inverosímiles».
No hay más información sobre el texto «La Mujer Alta».
Este texto forma parte del libro «Narraciones Inverosímiles».
Descargar ePub «La Mujer Alta»
Descargar Kindle «La Mujer Alta»
Edición dislexia «La Mujer Alta»
Enviar a Kindle «La Mujer Alta»
Enviar a Pocketbook «La Mujer Alta»
Edición física «La Mujer Alta»
Denunciar libro «La Mujer Alta»
—¡Habla! —respondí yo, comenzando a sentir, en efecto, no sé qué arrepentimiento de haber entrado en aquella casa, al ver la expresión de cobardía que se pintó en el rostro de mi amigo.
—Oye… —repuso él, enjugándose la sudorosa frente.
No sé si por fatalidad innata de mi imaginación, o por vicio adquirido al oír alguno de aquellos cuentos de vieja con que tan imprudentemente se asusta a los niños en la cuna, el caso es que desde mis tiernos años no hubo cosa que me causase tanto horror y susto, ya me la figurara mentalmente, ya me la encontrase en realidad, como una mujer sola, en la calle, a las altas horas de la noche.
Te consta que nunca he sido cobarde. Me batí en duelo, como cualquier hombre decente, cierta vez que fue necesario, y recién salido de la Escuela de Ingenieros, cerré a palos y a tiros en Despeñaperros con mis sublevados peones, hasta que los reduje a la obediencia. Toda mi vida, en Jaén en Madrid y en otros varios puntos, he andado a deshora por la calle, solo, sin armas, atento únicamente al cuidado amoroso que me hacía velar, y si por acaso he topado con bultos de mala catadura, fueran ladrones o simples perdonavidas, a ellos les ha tocado huir o echarse a un lado, dejándome libre el mejor camino… Pero si el bulto era una mujer sola, parada o andando, y yo iba también solo, y no se veía mas alma viviente por ningún lado… entonces (ríete si se te antoja, pero créeme) poníaseme carne de gallina; vagos temores asaltaban mi espíritu; pensaba en almas del otro mundo, en seres fantásticos, en todas las invenciones supersticiosas que me hacían reír en cualquier otra circunstancia, y apretaba el paso, o me volvía atrás, sin que ya se me quitara el susto ni pudiera distraerme ni un momento hasta que me veía dentro de mi casa.
18 págs. / 31 minutos.
345 visitas.
Publicado el 8 de diciembre de 2020 por Edu Robsy.
Este texto no ha recibido aún ninguna valoración.
Para valorar «La Mujer Alta» es necesario identificarse en textos.info.
50 libros publicados.