Textos por orden alfabético publicados por Edu Robsy etiquetados como Filosofía disponibles | pág. 3

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Del Sentimiento Trágico de la Vida

Miguel de Unamuno


Filosofía, Ensayo


I. El hombre de carne y hueso

Homo sum; nihil humani a me alienum puto, dijo el cómico latino. Y yo diría más bien, nullum hominem a me alienum puto; soy hombre, a ningún otro hombre estimo extraño. Porque el adjetivo humanus me es tan sospechoso como su sustantivo abstracto humanitas, la humanidad. Ni lo humano ni la humanidad, ni el adjetivo simple, ni el adjetivo sustantivado, sino el sustantivo concreto: el hombre. El hombre de carne y hueso, el que nace, sufre y muere —sobre todo muere—, el que come y bebe y juega y duerme y piensa y quiere, el hombre que se ve y a quien se oye, el hermano, el verdadero hermano.

Porque hay otra cosa, que llaman también hombre, y es el sujeto de no pocas divagaciones más o menos científicas. Y es el bípedo implume de la leyenda, el ζῷον πολιτικόν de Aristóteles, el contratante social de Rousseau, el homo oeconomicus de los manchesterianos, el homo sapiens, de Linneo, o, si se quiere, el mamífero vertical. Un hombre que no es de aquí o de allí, ni de esta época o de la otra, que no tiene ni sexo ni patria, una idea, en fin. Es decir, un no hombre.

El nuestro es el otro, el de carne y hueso; yo, tú, lector mío; aquel otro de más allá, cuantos pesamos sobre la tierra.

Y este hombre concreto, de carne y hueso, es el sujeto y el supremo objeto a la vez de toda filosofía, quiéranlo o no ciertos sedicentes filósofos.

En las más de las historias de la filosofía que conozco se nos presenta a los sistemas como originándose los unos de los otros, y sus autores, los filósofos, apenas aparecen sino como meros pretextos. La íntima biografía de los filósofos, de los hombres que filosofaron ocupa un lugar secundario. Y es ella, sin embargo, esa íntima biografía, la que más cosas nos explica.


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Dominio público
311 págs. / 9 horas, 5 minutos / 2.232 visitas.

Publicado el 27 de julio de 2019 por Edu Robsy.

Discurso del Método

René Descartes


Ensayo, Filosofía, Ciencia


Prólogo para el Discurso del Método Para bien dirigir la razón y buscar la verdad en las ciencias.

Si este discurso parece demasiado largo para leído de una vez, puede dividirse en seis partes: en la primera se hallarán diferentes consideraciones acerca de las ciencias; en la segunda, las reglas principales del método que el autor ha buscado; en la tercera, algunas otras de moral que ha podido sacar de aquel método; en la cuarta, las razones con que prueba la existencia de Dios y del alma humana, que son los fundamentos de su metafísica; en la quinta, el orden de las cuestiones de física, que ha investigado y, en particular, la explicación del movimiento del corazón y de algunas otras dificultades que atañen a la medicina, y también la diferencia que hay entre nuestra alma y la de los animales; y en la última, las cosas que cree necesarias para llegar, en la investigación de la naturaleza, más allá de donde él ha llegado, y las razones que le han impulsado a escribir.


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Dominio público
63 págs. / 1 hora, 51 minutos / 1.027 visitas.

Publicado el 27 de septiembre de 2016 por Edu Robsy.

Ecce Homo

Friedrich Nietzsche


Filosofía


Prólogo

1

Como preveo que dentro de poco tendré que dirigirme a la humanidad presentándole la más grave exigencia que jamás se le ha hecho, me parece indispensable decir quién soy yo. En el fondo sería lícito saberlo ya: pues no he dejado de «dar testimonio» de mí. Mas la desproporción entre la grandeza de mi tarea y la pequeñez de mis contemporáneos se ha puesto de manifiesto en el hecho de que ni me han oído ni tampoco me han visto siquiera. Yo vivo de mi propio crédito; ¿acaso es un mero prejuicio que yo vivo? Me basta hablar con cualquier «persona culta» de las que en verano vienen a la Alta Engadina para convencerme de que yo no vivo. En estas circunstancias existe un deber contra el cual se rebelan en el fondo mis hábitos y aun más el orgullo de mis instintos, a saber, el deber de decir: ¡Escuchadme, pues yo soy tal y tal. ¡Sobre todo, no me confundáis con otros!

2


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Dominio público
107 págs. / 3 horas, 8 minutos / 3.200 visitas.

Publicado el 28 de marzo de 2017 por Edu Robsy.

El Arte de la Prudencia

Baltasar Gracián


Filosofía, tratado


Aprobaciones

Publícala Don Vincencio Juan de Lastanosa, y la dedica al Excelentíssimo Señor Don Luis Méndez de Haro, Conde Duque.

Con licencia. Impresso en Huesca, por Juan Nogués. Año 1647


Aprobación del Padre M. Fr. Gabriel Hernández, catredático de Theología de la Universidad de Huesca, de la Orden de San Agustín

Visto he, por mandado del Ilustre Señor Dotor Gerónimo de Arasqüés, canónigo de la Santa Iglesia de Huesca, Oficial Eclesiástico y Vicario General de su Obispado, este libro intitulado Oráculo manual y arte de prudencia, sacada de las Obras de Lorenço Gracián, que publica don Vincencio Juan de Lastanosa. He admirado en tan poco cuerpo tanta alma. Es una quinta essencia de la más recóndita prudencia, que ya no se alimentan de otro los entendidos. Vense aquí de una vez todas las obras deste Autor, y, si cada una de por sí es un prodigio, todas aquí en delecto harán una çifra de ellos. Siempre tuve por dificultosa el Arte de Prudencia, pero quien supo hallar reglas a la Agudeza pudo encargar preceptos a la Cordura. No tiene cosa contra nuestra Santa Fe; antes, es un espejo de la razón, moderna maravilla de aciertos. Ni es escollo de las christianas costumbres, sino un discreto realce de las acciones, en quien el Ingenio admire lo que el Juizio logre. Éste es mi parecer. En el Convento de Nuestro Padre San Agustín de Huesca. Março, a 11 de 1647.


Fray Gabriel Hernández.


Vista la Aprobación del Padre M. fray Gabriel Hernández, damos licencia que se imprima el Oráculo manual y Arte de Prudencia.

El Doctor Gerónimo Arasqüés, Oficial Vicario General.


Aprobación del Doctor Juan Francisco Andrés, Chronista del Reino de Aragón


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Dominio público
98 págs. / 2 horas, 53 minutos / 5.837 visitas.

Publicado el 5 de marzo de 2018 por Edu Robsy.

El Caminante y su Sombra

Friedrich Nietzsche


Filosofía


Introducción

La sombra.—Hace mucho tiempo que no te oigo hablar; quiero ofrecerte la oportunidad de que lo hagas.

El caminante.—¿Quién es? ¿Dónde hablan? Me parece que me oigo hablar, aunque con una voz más débil que la mía.

La sombra.—(Tras una pausa) ¿No te agrada tener la oportunidad de hablar?

El caminante.—¡Por Dios y por el resto de cosas en las que no creo! ¡Es mi sombra la que habla!: la estoy oyendo, pero no me lo creo.

La sombra.—Supongamos que así es. No pienses más en eso. Dentro de una hora habrá acabado todo.

El caminante.—En eso precisamente estaba yo pensando, cuando en un bosque de los alrededores de Pisa vi unos camellos, primero dos y luego cinco.

La sombra.—Bueno será que tanto tú como yo seamos igualmente pacientes con nosotros mismos, una vez que nuestra razón guarda silencio; de este modo, no usaremos palabras agrias en nuestra conversación, ni nos pondremos reticentes el uno con el otro si no nos entendemos. Si no se sabe dar una respuesta completa, basta con decir algo; es la condición que pongo para charlar con alguien. En toda conversación un tanto larga, el más sabio dice por lo menos una locura y tres estupideces.

El caminante.—Lo poco que exiges no es muy halagador para el que te escucha.

La sombra.—¿Es que tengo que adularte?

El caminante.—Yo creía que la sombra del hombre era su vanidad y que, en tal caso, no preguntaría si había de adular.

La sombra.—Por lo que yo sé, la vanidad del hombre no pregunta, como he hecho yo dos veces, si puede hablar: habla siempre.


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Dominio público
142 págs. / 4 horas, 9 minutos / 5.139 visitas.

Publicado el 28 de marzo de 2017 por Edu Robsy.

El Capital

Karl Marx


Tratado, tratado político, filosofía


Nota preliminar

Al dar a la estampa una versión española de El Capital, de Carlos Marx, compendiado y precedido de un estudio sobre el Socialismo científico, por Gabriel Deville, creemos prestar un señalado servicio, no solo a los que busquen en la obra del ilustre comunista alemán nuevas y bien templadas armas para combatir en pro de esa transformación social a que aspira y por la que pelea la clase trabajadora de ambos mundos, sino además a todos los que sinceramente se consagran al estudio de los problemas sociales, no contentándose con esos juicios a priori que subrayan diariamente la increíble ignorancia y la más increíble ligereza de los escritores a sueldo de la burguesía.

Poco o nada podremos añadir al luminoso prefacio en que Deville expone a grandes rasgos la doctrina de Marx; pero séanos permitido insistir sobre un punto de la mayor importancia: en esta exposición rápida de la teoría marxista, lo mismo que en el compendio o resumen de El Capital y en sus apreciaciones acerca de la evolución económica que estamos presenciando y de la influencia que esta evolución ejerce en el movimiento revolucionario que arrastra a los proletarios de todos los países, Deville se ha ajustado con probidad y fidelidad absolutas al pensamiento dominante en la obra que trata de dar a conocer, llevando sus honrados escrúpulos hasta el extremo de no permitir que se imprimiera ni una página de su libro sin que Marx y, después de su muerte, Engels, revisasen tanto el Compendio, como el Prefacio y el Estudio sobre el Socialismo científico.

Con lo cual quedan desvanecidas de antemano las dudas que sobre este punto pudieran ocurrir.

Prefacio

Solo por el estudio, por la observación de la naturaleza de las cosas y de los seres, es como el hombre, consciente de sus efectos, puede hacerse dueño cada día más de su propio movimiento.


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Dominio público
256 págs. / 7 horas, 28 minutos / 347 visitas.

Publicado el 28 de julio de 2022 por Edu Robsy.

El Contrato Social

Jean-Jacques Rousseau


Filosofía, Política


Libro I

Quiero investigar si en el orden civil puede existir alguna norma de administración legítima y segura, considerando a los hombres tal como son y a las leyes tal como pueden ser. Trataré de unir siempre en esta investigación lo que permite el derecho con lo que establece el interés, de forma que no haya oposición entre justicia y utilidad.

Entro en materia sin demostrar la importancia del tema. Me preguntarán si soy un príncipe o un legislador para escribir sobre política. Respondo que no y que por eso mismo escribo sobre política. Si fuese un príncipe o un legislador no perdería el tiempo diciendo lo que hay que hacer, sino que lo haría o me callaría.

Habiendo nacido ciudadano de un Estado libre y miembro del soberano, por poca influencia que pueda tener mi voz en los asuntos públicos, el derecho de votar basta para que tenga el deber de instruirme. Dichoso, cada vez que reflexiono sobre los gobiernos, de encontrar siempre nuevos motivos para amar al de mi país.

1. Tema de este primer libro

El hombre ha nacido libre y en todas partes se halla encadenado. Hay quien se cree el amo de los demás aunque sea más esclavo que ellos. ¿Cómo ha ocurrido este cambio? Lo ignoro. ¿Qué es lo que puede hacerlo legítimo? Creo poder resolver esta cuestión.


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Dominio público
123 págs. / 3 horas, 36 minutos / 2.756 visitas.

Publicado el 18 de octubre de 2017 por Edu Robsy.

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