Henry James (Nueva York, 15 de abril de 1843 – Londres, 28 de febrero de 1916) fue un escritor y crítico literario estadounidense (aunque pasó mucho tiempo en Europa y se nacionalizó británico casi al final de su vida) de finales del siglo XIX y principios del XX, conocido por sus novelas y relatos basados en la técnica del punto de vista, que le permite el análisis psicológico de los personajes desde su interior. Fue hijo de Henry James Sr. y hermano menor del filósofo y psicólogo William James.
Como escritor se considera a James como una de las grandes figuras de la literatura transatlántica. Sus obras están basadas frecuentemente en la yuxtaposición de personajes del Viejo Mundo, artístico, corruptor y seductor y el Nuevo Mundo, donde la gente es a menudo sincera y abierta, si bien sus matices y variaciones son múltiples.
En sus obras prefiere el drama interno y psicológico, y es un tema habitual suyo la alienación. Sus primeros trabajos son considerados realistas, pero de hecho durante su larga carrera literaria mantuvo un gran interés en una variedad de movimientos artísticos. Sus obras se han adaptado al cine muchas veces por directores tales como William Wyler (La heredera, adaptación de la novela Washington Square), Jack Clayton (Suspense), o James Ivory (Las bostonianas, La copa dorada).
El sentimiento de ser estadounidense en Europa es un tema recurrente en sus libros, que contrastan la inocencia norteamericana (una gran bondad unida a una ignorancia absoluta de la cultura y sociedad europeas) con la sofisticación del Viejo Continente. Este contraste entre la inocencia y la experiencia corruptora se muestra en obras como Roderick Hudson o El americano.
En obras posteriores el citado contraste se centrará en el ambiente artístico, como sucede en La muerte del león y en La lección del maestro. En la primera, una dama de la alta sociedad con ínfulas intelectuales acosa de forma incesante a un escritor para exhibirlo en sus reuniones, mientras que en la segunda un aspirante a escritor recibe una agridulce moraleja de su presunto mentor acerca de los sacrificios y renuncias inherentes a la vida del creador.
A partir de 1890 el tema de la inocencia presenta una nueva faceta. Los años anteriores han sido amargos: su padre, su madre y uno de sus hermanos menores han muerto, novelas como Las bostonianas no han tenido la recepción esperada y sus obras teatrales han fracasado. Todo ese dolor y decepción se reflejarán a través de historias de fantasmas (Otra vuelta de tuerca, El rincón feliz, Sir Edmund Orme). En ellas, el contraste se situará entre el mundo real y el supranatural.